jueves, abril 13, 2006

Ahora...

de repente, y sin quererlo, me había acostumbrado a esperarte en el mismo sitio y a la misma hora.
Y ahora tendría que volver a la rutina de no conocerte.

Pero ya no había vuelta atrás, todo era como uno de esos coches con cuerda, que siempre van hacia delante, nunca retroceden.

Ahora era la hora de marcharme, pero yo había querido perder todos mis billetes.


que te quería con los dientes,
con todas las uñas clavadas en la espalda.


que te quería de viaje
en botellas y maletas.

que te quería recién duchado
y en espera
(falta de personal).

que te quería sin parar,
hasta quedarme sin aliento.

que te quería hasta que sudaba,
con el ceño fruncido.


te quería y me pedías que te olvidara/olvidase.



y yo no puedo parar de llorar.



Seguro que ahora, siempre que me levante, notaré tu respiración en la nuca, como cuando jugábamos a las canicas en tu espalda.

Todo va a ser distinto a partir de ahora

3 comentarios:

Pekisch dijo...

esto es tristemente precioso..

no_se_es dijo...

es cierto que ahora todo será distinto .. pero no dejes de dar cuerda a tu coche por que tienes muchos caminos que recorrer.. y si puedes arranca los retrovisores.
ánimos..

Anónimo dijo...

Best regards from NY! discounted multitrip travel insurance Betting betting las sports sports vegas Lifted hummer h2 picture 2001 accessory dodge durango Anglos are shitting in theri pants texas professor free horse racing tip sheets Knight hardcore